Cubre el manto
la pedrería-lengua,
la casa sola,
el lugar-no.
La mano que sacude el fraseo
insiste con los mismos acordes:
uno detrás del otro,
todos unidos por el silencio.
Y hacia mí,
un grupo de perros:
obstinados, indeterminados, reproducidos.
El lado oscuro del vocablo fantasma.
¿Cómo se dice esto?
¿Cómo se dice aquello?
Cubre el manto
la pedrería-lengua,
la casa sola,
el lugar-no.
2 comentarios:
esa teno! el no lugar me asusta un poco, recuerdo la zona fantasma donde son condenados tres malechores en la pelicula de Superman, un lugar que es la nada, y recuerdo una frase de la tortuga montreaux: "...a veces tengo miedo, de sentir el infinito"
Buen poema; al menos, transmite mucho. Gracias por compartir tu blog. Saludos. Susana www.susanalizzi.blogspot.com
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